Curaduría: Alexis Fabry

Leonora Vicuña retrata el Santiago siniestro de los años más oscuros de la dictadura: las calles poco iluminadas, los bares, los restaurantes, los antros que frecuentan meseros, bailarines, borrachos, travestis y poetas. Personas cuya vida podría escribirse con tiza en las pizarras de los menús, y cuya silueta ella acaricia con la punta de sus lápices de colores sobre la gelatina de plata: noches cenicientas bajo el toque de queda, donde todavía relumbran escasos destellos de deseo. En esos mismos años, junto con Ramón Díaz Eterovic, dirige la revista de poesía La Gota Pura, que conoce una difusión internacional pese a la censura. También crea, con la ayuda de otros, la Asociación de los Fotógrafos Independientes (AFI), cuyas imágenes logran escapar al control férreo de los militares chilenos.

Leonora Vicuña Navarro:

Fotógrafa nacida en Chile en 1952.

En París, Francia, se recibe de licenciada en Antropología. Completa estudios de fotografía profesional en la Escuela Fotoarte de Santiago de Chile. Recibe el diploma de realizadora multimedia en la Escuela Superior de Realización Audiovisual de París (ESRA).

Tanto en Chile como en el exterior, ha participado en numerosas exposiciones: Días de tango (1980), Hotel-Chile (1981 y 1984), L’écume des bars (1985), Intérieurs (1987), Photo-Peinture (1990), Iluminaciones París-Santiago (1992), Mythographies (1994), Les faubourgs de Barcelone (1996), así como en muestras colectivas: Encuentros Internacionales de Arlés (1986 y 1994), Photographier l’Amérique latine (1988), diversas exposiciones itinerantes de la galería Vrais Rêves en Lyon (1989-1999), Seis visiones (1995) y París/Flash en Santiago de Chile (1996), América Latina 1940-2013 en Nueva York (2014), PhotoEspaña (2015), Expo Voces 2015 en Londres, en Armory Show de Nueva York (2016), FotoMéxico (2019 y 2020), entre otras.

Sus trabajos fotográficos multimediales Bares y garzones, Un homenaje visual y Nosotras Lafkenche de Huapi han sido expuestos en Chile, Francia, Alemania y Estados Unidos.

Obtuvo las becas Amigos del Arte (1981), Fondart Nacional (2001 y 2006), Fundación Andes (2002), Fondart Regional (2006) y el premio Altazor de las Artes (2010) y el Fondart de excelencia en artes integradas en 2006.

Su obra forma parte de colecciones privadas de su país, España y Francia.

Desde 2021, dirige el espacio Puerto-Peral, lugar de talleres y residencias de poetas y artistas visuales, en la comuna de Carahue, Araucanía, lugar que es también su residencia.

Retrato realizado por Mauricio Ascencio Zúñiga.

La exposición Carrusel de melancolías cuenta con el apoyo de Bodega Catena Zapata y Sinteplast.