


Según uno de los fotógrafos, un conjunto de fotos escamoteados mientras trabajaban en acontecimientos periodísticos y labores editoriales -esas imágenes que no iban a ilustrar la nota del día, que no eran centrales - una acumulación de módicas alucinaciones cotidianas flotando en la cruda realidad. Según el otro fotógrafo, la extrañeza frente a lo cotidiano, una conexión con el misterio que nos propone la fotografía; misterio de algo que comienza con la pretensión de registrar los hechos, lo real y se escabulle, convirtiéndose en un artefacto para explorar la perplejidad ante el mudo.
Esta colección de libros en pequeño formato consta de ejemplares dedicados a la fotografía, y viene a saldar un viejo anhelo de ARGRA (Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina), poder desde los mismos reporteros gráficos editar y publicar su labor.